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Rumania. Naturaleza, Fortalezas y Mitos.
Por Yadira Esquivel
Si viajas a Europa no olvides incluir en tu recorrido a uno de los países balcánicos más hermosos: Rumanía.
Rumanía está situada en una gran llanura dividida por lo Montes Cárpatos y al sur rodeado por el río Danubio, que actualmente es navegado por muchos cruceros fluviales. Posee una imagen injusta asociada a la antigua industria pesada y del petróleo, cuando en realidad ha conservado muchos espacios naturales mejor que otros países de Europa. Las costas del Mar Negro, el delta del Danubio, los Cárpatos y sus montañas lo hacen un país espectacular, además que para los amantes del senderismo este es un país ideal, ya que las vistas que los paisajes que descubrirán son prácticamente desconocidas.
Pensar en Rumanía no es solo hablar de Bucarest, su capital, llena de monumentos donde al menos 8 de ellos son considerados Patrimonio de la Humanidad, sino hay que pensar en un país lleno de naturaleza, fortalezas, gastronomía y de mitos como el del Conde Drácula
Con mínimo 6 días en este país podrás descubrir las maravillas que ofrece.
Bucarest
Al menos pasar una noche en su capital, te hará descubrir la diversidad de estilos de arquitectura francesa de inicios del siglo XX; fue nombrada como “la Pequeña Paris” pues sorprende por sus monumentos y edificios diversos.
No dejes pasar la oportunidad de adentrarte en La plaza de la Revolución, aquí comenzó la Revolución de 1989, que llevo al cambio del sistema comunista.
Sinaia
Este es uno de los puntos más visitados en Rumanía, a solo 1 hora 40 minutos de Bucarest, es una bella localidad alpina al pie de los montes Bucegi, en el Valle de Prahova.
Su emblema es el Castillo de Peles, un palacio de arquitectura neo renacentista con toques sajones. Cuenta con más de 160 salones y habitaciones, con lámparas de cristal Murano, vidrieras ricamente decoradas y vajillas de porcelana de Meissen y Sevres. El entorno del castillo se armoniza con los bosques de abetos y jardínes que lo rodean.
Una curiosidad de este castillo es que fue el primero en ser iluminado por corriente eléctrica, capricho de sus dueños que construyeron una pequeña central hidroeléctrica junto al río.
No solo por su castillo es conocida Sinaia sino también por sus aguas termales, cuyas sales minerales son apreciadas para diversos tratamientos. Aquí puedes encontrar hoteles de lujo, que ofrecen un sinfín de tratamientos de bienestar, casinos y todo tipo de diversiones.
Brasov
Es también una de las ciudades más visitadas de Rumanía por la cantidad de lugares de interés histórico que posee y por sus bellos monumentos que van desde el estilo gótico barroco y renacentista. Está localizada en el centro del país a 166 kilómetros de Bucarest y a 264 kilómetros al sureste de la región de Transilvania. Brasov es considerada como el lugar ideal para realizar cualquier tipo de vacación. Cualquier época del año es buena para visitarla: de mayo a septiembre las temperaturas son ideales y de diciembre a febrero puedes disfrutar de actividades invernales en la estación de esquí de Poiana Brasov. Al visitar Brasov no debes olvidar recorrer: el museo de la Primer Escuela Rumana, un museo que expone los primeros libros impresos en lengua rumana; la Iglesia Negra, una célebre iglesia en estilo gótico comenzada en 1384 y terminada en 1477 y que recibió la denominación actual tras el incendio general de 1689.
Toda la región de Brasov tiene un carácter alemán-medieval.
Una de las principales atracciones de Brasov es el Castillo de Bran que se encuentra a 25 kilómetros al noroeste de Brasov. Se trata de una mansión medieval muy bien conservada, rodeada de un aura de misterio y leyenda en torno al mito de Drácula de Bram Stoker. A pesar de que Stoker no conocía Transilvania, se basó en la investigación y en su imaginación para crear el lugar donde vivía el personaje del Conde Drácula. Construido en lo alto de una roca de 200 metros de altura, el Castillo de Drácula impresiona por sus torres y torreones, alberga unas 60 habitaciones a las que se llega a través de estrechas escaleras y muchas están conectadas por pasajes subterráneos en las que se encuentra colecciones de muebles, armas y armaduras de los siglos XIV al XIX. Del 1920 a 1957 sirvió de residencia real ya que el pueblo se lo regaló a la Reina María de Rumania. Ahora es un museo abierto a los turistas.
Sighisoara
Es otra de las poblaciones fundadas en el siglo XII por los sajones venidos de Alemania durante la edad media, Hoy en día es una de las ciudades medievales mejor preservadas de Europa lo que hizo que la UNESCO la incluyera como Patrimonio de la Humanidad en 1999.
Una visita obligada al llegar a Sighisora es La Torre del Reloj en la misma Plaza de la Ciudadela, uno de los monumentos más conocidos y visitados de la ciudad. El reloj el siglo XVII es toda una atracción con sus figuras, características de los relojes de Europa Central. Desde lo alto se pueden contemplar los tejados de Sighisoara, dando la impresión de que el tiempo no ha pasado.
Sighisoara es famosa por ser la ciudad natal de Vlad Dracula (Vlad Tepes) gobernante de Valaquia entre 1456 y 1462, conocido por su violencia terrible y por ser la base del mito de Drácula.
Sibiu
Se encuentra a 140 kilómetros al oeste de Brasov y a unas 3 horas y media de Bucarest, es las más importantes de las ciudades fundadas durante el siglo XII, fue el centro económico y cultural durante la edad media. La riqueza de las familias comerciantes permitió a la ciudad construir grandes edificios y fortificaciones, logrando un esplendor que aún se aprecia.
Sibiu destaca por su centro histórico, que es peatonal, con lo que la belleza de los edificios y la calma de las terrazas no se ven interrumpida por autos esto ha reforzado su carácter comercial y turístico, atrayendo a comercios y bares a esta zona. El centro estaba rodeado por impresionantes murallas de las que buena parte se conservan en buen estado, sobre todo 8 torres, las únicas que siguen de pie de las 39 originales. El centro incluye: la Ciudad Alta, con la Gran Plaza, la Plaza Huet y el Callejón de los Escalones que une la Ciudad Alta con la Ciudad Baja; el Puente de las Mentiras y la Plaza de los Orfebres.
Sibiu es un museo vivo. Recuerda visitar el restaurante más viejo de Rumania, el Butoiul de Aur (La Barrera Dorada) en lo Callejón de los Escalones.
Ahora bien si eres amante de los vinos la región de Maldova te ofrece sin duda una excelente opción para degustar de ellos. Puedes probar la colección de vino de 20 a 30 años de las bodegas Milestii Mici, la cual es probablemente un destino soñado para aquellos que aman y disfrutan del vino de alta calidad.
No hay que olvidar a los vinos moldavos hechos en casa con su sabor incomparable ni al Vermut Moldavo considerado el hermano mayor del Martini italiano el cual contiene infusiones de más de 20 tipos de plantas.
Para disfrutar de esto, tendrás que viajar hacia Chisanau y desde ahí disfrutar de un recorrido de 5 días conociendo la ciudad y sus bodegas de vino.
Hay un sinfín de lugares dentro de Rumanía que te invito a descubrir en tu próximo viaje. Cada ciudad y rincón de este país harán que pases unas vacaciones únicas, además de que como todo país del mundo, la población es el resultado de la mezcla y el mestizaje de la unión de diversas gentes venidas de diversos lugares; de esta mezcla ha surgido un país con problemas pero con mucha gente amable dispuestos a ayudar de manera desinteresada con una sonrisa pues es un país que reúne todo.
Hay que vivir los mejores momentos…!